lunes, 4 de junio de 2012

Colgando de tu cuello un Sábado de lluvia.

Te miro mientras duermes, no voy a despertarte y es que hoy se me agotó la esperanza porque con los que nos queda de nosotros ya no alcanza. Cuántas veces quise hacerlo bien y pequé por hablar demasiado. No saber dónde, cómo ni cuándo, todos estos años caminando juntos ahora no parecen tantos. Pero hoy nada es lo mismo ya no vamos a engañarnos. Que soy una mujer en el mundo que hizo todo lo que pudo, no te olvides ni un segundo que eres lo que más he querido en la vida.

No hay comentarios:

Publicar un comentario